La biblia nos habla sobre la armadura de Dios, el amor de Dios, la protección de Dios y el hijo de Dios. Sabemos que es el Todopoderoso, Creador del cielo y la tierra, Padre eterno y a quien le debemos alabanza. Es la figura de máxima autoridad en el cristianismo.
Tiene muchos nombres, como Jehová, Eloah, Yahveh y Adonai, pero, ¿quién realmente es Dios? ¿A quién nos referimos cuando hablamos de Él? ¿Cuál es el significado? ¿Qué hay más allá de la figura de este padre celestial? Tantas preguntas a veces llevan a la reflexión y al autodescubrimiento.
Aunque tenemos claro que existe un Dios, no siempre podemos hablar de él con claridad. Para el cristianismo, Dios es trascendental y omnipresente. Interviene activa y pasivamente en todos los sucesos del mundo aunque no podamos mirarlo y tocarlo.
En esta publicación descubriremos quién es El Dios de la Biblia. Leeremos la principal fuente de conocimiento, las sagradas escrituras, para desentrañar algunas claves acerca del Todopoderoso.
Una vez qué entiendas la magnitud de su figura, te relacionarás mejor con nuestro creador. ¡Acompáñanos!
¿Quién es el Dios de la Biblia?
En el planeta tierra convergen millones de personas de diferentes culturas y procedencias. Gracias a la mezcla de etnias, historia y creencias, las civilizaciones han ‘elegido’ sus propios dioses. Tenemos, por ejemplo, a los hindúes quienes adoran a Shiva, o a los griegos, quienes adoran a Zeus y dioses del olimpo. Tampoco podemos olvidar a los egipcios, quienes veneraban a Seth, Osiris y Nephythys.
Para los cristianos, hay uno solo: Jehová. Ya desde las primeras líneas de la Biblia nombran a un Dios, un ente omnipresente que se revela a sí mismo como creador de todo: planetas, cielo, tierra, humanos, animales, etc. Es un ser omnipresente y omnipotente. No fue creado por nadie y tiene forma de espíritu.
Se manifiesta como Padre, Hijo y Espíritu Santo. La biblia hablan de sus preferencias: ama a sus hijos, los humanos, y odia a los pecados. Desea lo mejor para todos, pero es estricto. No es subjetivo, es justo. Sí, odia el pecado, pero le da una oportunidad al pecador para que se arrepienta.
La biblia, a lo largo de los versículos, no explica cuál es la esencia de Dios, cómo se comunica, qué quiere para nosotros, quiénes son sus voces en la tierra, cómo podemos hablar con él, el inmenso amor que profesa a sus fieles, cómo envío a su propio hijo, Jesús, a salvar a la humanidad del pecado y cuáles son sus acciones para protegernos de los demonios que asechan y envenenan las mentes humanas con el objetivo de alejar a los fieles del camino correcto.
Significado de El Dios de la Biblia
La biblia indica que Dios es una divinidad. Es nuestro creador y se le debe devoción. Muchas veces se le nombra como ‘la trinidad’, un concepto usado para referirse al Padre, al hijo y al espíritu santo.
Las sagradas escrituras son tajantes: Dios es el dueño de todo. Es amor, es devoción, es fe. Nos habla cuando lo necesitamos, nos guía cuando nos perdemos y nos cuida cuando estamos en peligro.
Ya desde el primer libro, en su primera línea, se señala que Dios es el principio de todo.
A lo largo de los siguientes libros, se asevera la omnipotencia y omnipresencia. Diferentes autores destacan su eternidad, que estuvo antes de todo y lo estará después. Es autosuficiente y auto existente, a diferencia de los humanos que estamos por un corto periodo de tiempo y necesitamos agua, alimentos y oxígeno.
En diosnuestro.com encontrarás más sobre Dios, oraciones para comunicarte con él y el lore que rodea a la biblia y el cristianismo.
Versículos de la Biblia sobre Dios
Dios se menciona en prácticamente todos los libros de la Biblia. Lo encontramos en Génesis, en los Salmos, los Discípulos e incluso en Apocalipsis.
Algunos ejemplos son:
- Josue 1:9. Este versículo asegura que no debemos tener miedo, ya que Dios siempre nos acompaña a dondequiera que vayamos.
- Deuteronomio 4:29. En este versículo nos explican que si deseamos encontrar al Señor, debemos hacerlo con nuestra alma y corazón, ahí lo encontremos.
- Salmo 31:3. Este versículo explica que Dios es la guía, la roca y la fortaleza.