El salmo 42 es una oración que nos invita a mantener nuestra esperanza en Dios como clave fundamental para vida de fe. Generalmente, cuando se estudia, lo ponen en contexto con el 43, ya que se puede tomar como uno solo. También nos habla de esperar a Dios y el anhelo que hemos de sentir sobre su presencia. Tal como le mostraremos a continuación:
Salmo 42
1 Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, Así clama por ti, oh Dios, el alma mía.
2 Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo: ¡Cuándo vendré, y pareceré delante de Dios!
3 Fueron mis lágrimas mi pan de día y de noche, Mientras me dicen todos los días: ¿Dónde está tu Dios?
4 Acordaréme de estas cosas, y derramaré sobre mí mi alma: Cuando pasaré en el número, iré con ellos hasta la casa de Dios, Con voz de alegría y de alabanza, haciendo fiesta la multitud.
5 ¿Por qué te abates, oh alma mía, Y te conturbas en mí? Espera á Dios; porque aun le tengo de alabar Por las saludes de su presencia.
6 Dios mío, mi alma está en mí abatida: Acordaréme por tanto de ti desde tierra del Jordán, Y de los Hermonitas, desde el monte de Mizhar.
7 Un abismo llama á otro á la voz de tus canales: Todas tus ondas y tus olas han pasado sobre mí.
8 De día mandará Jehová su misericordia, Y de noche su canción será conmigo, Y oración al Dios de mi vida.
9 Diré á Dios: Roca mía, ¿por qué te has olvidado de mí? ¿Por qué andaré yo enlutado por la opresión del enemigo?
10 Mientras se están quebrantando mis huesos, mis enemigos me afrentan, Diciéndome cada día: ¿Dónde está tu Dios?
11 ¿Por qué te abates, oh alma mía, Y por qué te conturbas en mí? Espera á Dios; porque aun le tengo de alabar; Es él salvamento delante de mí, y el Dios mío.
Posiblemente por el contexto en que se estudia el salmo 42, algunos lo etiqueten como una alabanza de lamento escrito por hombres que podían adorar, antiguamente a Dios libremente. Es decir, que fueron ultrajados de la posibilidad de encontrar a Dios en las oraciones y ahora está prohibido como práctica común. Así que eso los llevó a que anhelaran la vida religiosa que antes disfrutaban.
Después de todo, la vida cristiana es el pan de cada día que debemos detener los fieles seguidores de Dios. Es algo normal cuando nos acercamos a algo y nos acostumbramos a su presencia, una vez que se nos quita, entones lo extrañemos. Es lo que se puede ver con la inscripción del Salmo 42, un grito al aire con una profunda tristeza de unos hombres que quieren volver a sus viejas a prácticas. Adorar a Dios sobre todas las cosas, incluso cuando no es posible.
Hay una mención muy importante que vale la pena señalar en los versículos de este increíble salmo de adoración. Y son ‘los hijos de coré’, que no son más que unos hombres en la total facultad de invocar el espíritu de Dios y adorarlo a tiempo completo. Aunque, el principal objetivo que estos tienen es la guía de un pueblo a un camino donde estos se convirtieran en cristianos perfectos. Se le otorgaba dicho privilegio increíble, en nombre el Espíritu Santo, para poder escribir varios capítulos de las escrituras.
Entonces podemos imaginar al Salmo 42 como una alegoría a los ciervos. Los ciervos que están en los desiertos, donde no encuentra agua y se muere de sed. También debe escapar de los depredadores y otras actividades necesarias a la que no tiene acceso. Así es como se puede suponer que se veían a sí mismos los Hijos de Coré, unos ciervos perdidos y rodeados de enemigos que necesitaban saciar su sed. Pero en vez de agua, estaban sedientos de Dios, de su presencia y amor.
Análisis del Salmo 42
El salmo comienza con un significado increíble que involucra a los ciervos anteriormente mencionados. Estos versículos capturan la esencia de lo que es la fe en las personas. Las personas necesitan de Dios para poder eliminar cada uno de sus males. Aquellos que lo tienen atormentados y no lo dejan vivir bien. El salmista realiza una excelente comparación de los ciervos sedientos con el deseo de los cristianos de que su alma sea de nuevo encontrada por Dios. Cosa que se puede notar al ver la conversación que tiene el salmista con su alma.
Con demasiada frecuencia equiparamos nuestra alma con la parte espiritual de nuestro cuerpo que se encuentra separado de lo físico. Imagina todas las partes del cuerpo, las arterias, músculos, sangre y más. Entonces, en algún rincón recóndito del cuerpo de un humano se encuentra el alma, lo más cercano a Dios que podemos poseer actualmente en el mundo terrenal. De esta forma, el salmista habla del alma como una parte que se encuentra necesitada de Dios para que no tenga más problema. Las palabras que contiene el Salmo 42 son una necesidad del Salmista por encontrarse nuevamente con la presencia del Señor supremo y casa una de sus bendiciones.
En el contexto del salmo, en realidad el Salmista se encontraba demasiado desesperado debido a las constantes burlas de sus enemigos. Tenía los recuerdos de su adoración pero no completos, recordó aquellos tiempos cuando el pueblo de Dios celebraba al protector de los males. Un recuerdo efímero que hacer recordar a los presos anhelando la libertad. Algo así es como se asimila el Salmo 42, una necesidad de Dios y una excelente oportunidad para reflexionar sobre la importancia del Señor en nuestra vida. Mientras Él esté no nos faltará absolutamente nada, porque en Él todo es posible.
Explicación del Salmo 42
Versículo del 1-5
El principio de estos versículos nos deja claro que el redactor del Salmo 42 desea a Dios como su principal bien y necesidad en consecuencia de una vida llena de lamentos. Ve a Dios como un ancla y lo cabalga como una tormenta. Su alma, que es noble, tiene total satisfacción en la presencia de Dios porque allí es donde los corazones sanaban y las almas se limpian. No hay lugar más ameno para descansar que no sea donde Dios vive.
En la mitad de estos versículos también hace una principal aseveración que sin la presencia de Dios, las almas nobles se sacudirán con fuerza. Tal como sucede con David, que no fue los placeres del hombre y las malas intenciones de los enemigos lo que lo afligió, sino el poco recuerdo libre en la casa de Dios y el placer que sentí al estar ahí. Ya que se comunicaban constantemente.
Versículos de 6-11
Por otra parte, en la segunda mitad del Salmo 42 explican seriamente que la única oportunidad que tenemos para olvidar y desechar nuestras miserias es recordando a Dios. Anhelando su grandiosa misericordia y viendo los problemas como un aprendizaje. Incluso cuando estos se juntan uno tras otro formando una tormenta peligrosa de sentimientos, ya que Dios los anulará completamente y nos hará sentir bien al momento. Es en el nombre de nuestro salvador que tenemos que esperar y rezar.
La palabra de Dios es fortaleza completa, una sola de ellas bastará para acabar con la tormenta y convertir la oscuridad de la noche en una imponente luz del mediodía. Las quejas amargas, aquellas infundadas con dolor se convertirán en alabanzas de alegría. La fe creyente repleta de misericordia se han de combinar con las oraciones y entonces así saldremos vencedores.