El salmo 92 es una oración divina que sirve como canción para el día del reposo, por lo que puede emplearse como texto litúrgico en las festividades de la iglesia. Posiblemente se usó en las tradiciones judías para cantar en la mañana al ofrecer el primer cordero. Sin embargo, cuando se analiza bien te das cuenta que es una alabanza de acción de gracias a Dios, tal como te lo contaremos a continuación:
Salmo 92
1 Bueno es alabar á Jehová, Y cantar salmos á tu nombre, oh Altísimo;
2 Anunciar por la mañana tu misericordia, Y tu verdad en las noches,
3 En el decacordio y en el salterio, En tono suave con el arpa.
4 Por cuanto me has alegrado, oh Jehová, con tus obras; En las obras de tus manos me gozo.
5 ¡Cuán grandes son tus obras, oh Jehová! Muy profundos son tus pensamientos.
6 El hombre necio no sabe, Y el insensato no entiende esto:
7 Que brotan los impíos como la hierba, Y florecen todos los que obran iniquidad, Para ser destruídos para siempre.
8 Mas tú, Jehová, para siempre eres Altísimo.
9 Porque he aquí tus enemigos, oh Jehová, Porque he aquí, perecerán tus enemigos; Serán disipados todos los que obran maldad.
10 Empero tú ensalzarás mi cuerno como el de unicornio: Seré ungido con aceite fresco.
11 Y mirarán mis ojos sobre mis enemigos: Oirán mis oídos de los que se levantaron contra mí, de los malignos.
12 El justo florecerá como la palma: Crecerá como cedro en el Líbano.
13 Plantados en la casa de Jehová, En los atrios de nuestro Dios florecerán.
14 Aun en la vejez fructificarán; Estarán vigorosos y verdes;
15 Para anunciar que Jehová mi fortaleza es recto. Y que en él no hay injusticia.
El salmo 92 es una oración interesante que se divide en tres partes, siendo dos de cuatro versículos y el último de siete. Por lo que quedaría de la siguiente manera su estructura: 1-4, 5-8 y 9-15. El salmo nos habla mucho del acercamiento que debemos tener con Dios, y se menciona que hay que florecer en su presencia. Cuando hablamos de esto no referimos a la comunicación constante que se ha de mantener entre el cristiano correcto y su Padre.
Es normal ver versículos como este hablar sobre Dios y cómo deben comportarse los hijos respectivamente. Ya que si eres un cristiano de bien, hay que saber cómo acercarse al Señor. Y qué mejor forma de acercarse a Dios que no sea a través de la oración, los cantos y las alabanzas.
El salmo hace una buena muestra de que no debemos esperar a estar viejos para buscar a Dios. Ya sea en la gordura y en la juventud, siempre debemos estar en nuestra alabanza. Para decirle nuestros males y que Él nos saque de los problemas. Algunos cristianos se encuentran en el hoyo profundo de arcilla, como se encontró David en distintas situaciones. Pero él en todas las etapas de su vida se encontró firme en la decisión de buscar a Dios y no esperar a un momento en específico en buscarlo.
No existe tal cosa como que una edad y un momento en específico para buscar a Dios, sino que mientras vamos comunicándonos con el señor, entonces nos hacemos más fuerte. Uno con Él. Porque el lazo que nos une no se rompe tan fácilmente si se ha forjado correctamente. A esto es lo que se refiere el Salmo 90 con florecer junto a Dios.
Análisis del Salmo 92
Como bien ocurre en muchas otras oraciones, cuando hacemos un análisis al salmo 92 nos damos cuenta que no es más que una reflexión de alegría y prosperidad ante Dios. Nos demuestra que siempre le debemos dar las gracias al Señor y cantar las alabanzas a su nombre. Declarar lo grandísimo que es su presencia y lo hermoso que es su compañía en nuestros corazones. Dios debe ser una roca para nosotros, así como venerarlo por ser nuestro salvador.
En parte, lo que nos quiere decir el Salmo es que no hay nadie más en esta tierra que merezca más reverencia que el Señor. Dejando claro a través de las palabras hebreas JHVH, una abreviatura para Jehová. Desde la antigüedad esta es una práctica sagrada, cantar alabanza y gritar a los cielos por la grandeza del señor y que debe mantenerse a día de hoy.
Otra de las lecciones que da el Salmo 90 es que no hay momento perfecto para dar las gracias a Dios. Siempre es un buen momento si es lo que deseas encontrar. No solo en la mañana y en las noches, sino que aclamar siempre la misericordia del señor por la fidelidad que nos promete. Si nuestra gratitud es sincera, entonces se demostrará tanto en la mañana, como la tarde y noche. Este concepto es sumamente importante en la vida de un cristiano correcto. De no estar viviendo una vida llena de gratitud a Dios, entonces deberíamos considerar si seremos salvados cuando llegue el momento del juicio final.
Recuerde que todos nacemos como pecadores y merecemos ir al infierno por los pecados cometidos de la humanidad. Pero es la misericordia de Dios que nos está dando lo que merecemos dependiendo de la vida que estemos viviendo Es por eso que debemos vivir en gratitud que Él vendrá a salvarnos incluso si nuestros pecados ya vienen siguiéndonos. Él alzará la mano y hará desaparecer nuestros pecados.
Explicación del salmo 92
Versículos del 1-6
Los primeros versículos del salmo 92 no son más que una muestra del privilegio que tenemos nosotros los humanos por ser admitidos en la gracia de Dios. Solo eso es razón suficiente para alabar a Dios y esperar ser aceptados en los cielos junto a su presencia. No solo en los días de reposo debemos darle gracias, sino que todos los días y en todos lados. Es decir, sí se puede orar en privado pero no es suficiente, sino que en público, en la iglesia y en presencia de nuestros familiares debemos hacerle saber al señor que es nuestro salvador.
Versículos del 7-15
El pensamiento común puede ser que Dios les otorga sabiduría y prosperidad a los hombres malvados. Pero en realidad esa es una prosperidad con desagrado, que no dura para nada y que tarde o temprano se vendrá abajo. Y, aunque para nosotros la felicidad está asegurada, también debemos buscar la salvación por nosotros mismos. Hay que contemplar y compartir la gloria del redentor. Es por la gracia de su palabra y espíritu que los creyentes deben recibir y compartir la grandeza del señor.